Esta semana (una muy terrible) aprendí algo muy importante, y he aquí la historia del cómo.
Las lecciones comenzaron el domingo: mientras bajaba la escalera para regresar a martirizarme con la tarea, algo sucedió y caí. No creo haberme resbalado ni haberme saltado un escalón; no estoy segura del por qué. Cuando te caes (y sabes que será alarmante) hay un momento en el que te preparas. Como en Sherlock (aunque no tan Sherlock) calculas tus posibilidades y buscas cómo detenerte o amortiguar tu caída o lo que sea. Por eso cuando vas hablando con alguien, tu instinto agarrarte a esa persona. Pues como fuera, cuando ya iba cayendo y mientras ponía las manos para detener el "rodar por las escaleras" y decía "ohdiosm" me interrumpió un freno. El freno fue mi cabeza estrellándose contra la pared. Cuando uno se cae, lo que menos piensa es pegarse con la pared menos cercana, así que eso pasó. Fue un gran golpe, por varios minutos estuve segura de que fue una contusión. No fue médicamente valorable así que me levanté y me fui a poner hielo.
Cuando le conté esto a una amiga, ella preguntó: "¿y se rieron de ti?"
Y yo dije "No, si nadie fue a levantarme."
Y me di cuenta de lo triste que era eso.
No estaba sola, mi papá solamente es muy irresponsable. Pero sí, a pesar del fuerte sonido, nadie me ayudó.
La otra lección se remonta a la semana pasada. Los planes eran que tuviera presentación en la clase de las 7. Luego, exámen en clase de la 1. Pero la profesora de la primera clase no pensaba en lo mismo y no tuve presentación, que tuvo que postergarse hasta la siguiente (esta) semana. Luego estaba el Rally. El Rally jode nuestra existencia cada año y lo odio infinitamente (significa que no cambiaré de opinión). El nuevo coordinador se hizo güey hasta dos horas antes que cerraran la vialidad para cancelar clases oficialmente. Tuvimos que esperar a la profesora de la 1 para que nos dijera "Pues nos vamos, entonces. Examen la siguiente clase. Y pues presentaciones maratónicas, S y allizzia". Yes, life is THAT fucked. A dichas presentaciones y examen se sumaba la presentación de la clase de las 10, que es la que siempre nos trae con el Jesús (entre otras materias) en la boca.
Entonces así me tienen, el viernes a punto de llorar de la pre-ocupación y el pre-estrés. Así que un compañero se ofrece a ayudarme. En otras circunstancias hubiera dicho que no, porque eso es abuso y no hay que aprovecharnos de la gente que siempre está dispuesta a ayudar a otra gente. Pero definitivamente no iba a alcanzar así que HANDS ON, le dije que ya estaba, que si me ayudaba a mi tema de la clase de la 1.
Hizo el mejor de los trabajos y yo hice la más corta de las presentaciones (a la profesora no pareció molestarle, creo).
Ese día acabó hoy. Y, empezando el fin de semana pasado, con todo el trabajo por delante, estaba segura de que iba a terminar con lágrimas y en el suelo en posición fetal.
Pero nada de eso, las presentaciones fueron mejor de lo que esperaba. Yo acabé mejor de lo que esperaba (aunque sí esperaba estar en una fiesta y al menos ligeramente alcoholizada).
Entonces, quizá sea el cansancio cerebral, he llegado a una lección vital.
Uno no puede estar sólo. Necesitas a alguien importante que, cuando tengas mucho trabajo te diga que te puede ayudar y haga el mejor de los trabajos; pero no sólo a la persona explotable, también necesitas a alguien que te abrace y te diga que ni pedo, que así es la vida (decir que todo va a ir bien no es de compas). Okay, se puede prescindir del explotable, puedes beber kilo y medio de azucar y no dormir en tres días. Y sí, también se puede prescindir del apoyo moral; te puedes grabar echándote ánimos o ponerte frente a un espejo y decirte que si tú fueras otra persona definitivamente te follarías (después de eso puedes follarte a ti mismo, si quieres, si ayuda, si tienes tiempo). Si eso no funciona, puedes comer cosas grasosas y sentir como la grasa oprime tu pecho (es casi lo mismo que un abrazo). Pero hay alguien quien no se puede prescindir y definitivamente es la persona más importante.
Cuando estés estresado y sientas que no vas a dar la altura y creas que vas a enfermar frente al grupo al que estés hablando y lleves tu ropa limpia recien descolgada al piso de arriba y te convenzas de que no terminarás el trabajo y no aprenderás nada y de repente te caigas de las escaleras que bajas para regresar a tu centro de trabajo...
TEN UNA PERSONA QUE SE ASEGURE QUE NO ESTÁS MUERTA.
Al menos vive con alguien por si te caes de las escaleras y el golpe que te des te deje inconsciente o necesites ayuda médica. No seas la mujer que se murió en su auto y nadie la encontró hasta seis años después que el banco decidió limpiar la casa. No, ten alguien que al menos llame a la ambulancia aunque ya estés muerta, y ten alguien que se asegure que tu tumba tendrá un nombre.
No tengan un padre que sólo grita "qué" porque seguramente no estarán en condiciones de contestar. Eso no es cool.
Gente adulta del mundo: consígase un roomie. Es barato y la mitad de las veces es seguro.
PD. Mientras exponía, la profesora me preguntó si quería un café. Confundida, le negué y agradecí. Enseguida de que sale, un compañero me pregunta que si no quiero agua aunque sea. Aunque no trabajé mucho, aparentemente luzco terrible después de extenso trabajo cerebral. Also, búscate a alguien que te sepa maquillar (para esconder la palidez de trabajé-durante-una-semana-entera).
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